Saw: Juego Macabrón

Antídoto contra el Aro 2

Justo cuando empezaba a creer que el género de terror ya no saba para más, me encuentro con la refrescante cinta Saw.

El concepto de saw fue creado, escrito, dirigido y actuado por un par de veinteañeros. James Wan y Leigh Whannell lograron con 1,200,000 dólares lo que muchos estudios no logran con muchos millones más.

La cinta trata de el asesino del rompecabezas, el cual técnicamente no es un asesino, pues no ha matado a nadie, sino que encuentra la manera de que sis víctimas se suiciden. Los atrapa y los pone en un juego donde las únicas opciones son la vida y la muerte. Y la opción de la vida no es tan sencilla. Los protagonistas despiertan encadenados en extremos opuestos de un enorme baño abandonado. Al centro está el cadáver de un sujeto que aparententemente se dió un tiro. Poco a poco irán descubriendo el juego macabro en el que se han metido y tendrán que trabajar juntos para lograr escapar.

El asesino del rompecabezas no es un ser despiadado que quiere la muerte. No. Su intención es ayudar a la gente a ser mejor. Deja de reclamar atención, deja de fingir que estás enfermo, deja las drogas, no engañes a tu esposa, acércate a tu familia. Muchas personas no agradecen estar vivas, pero sus víctimas sí. Ahora lo están.

La película es violenta. Algunas escenas quizá sean demasiado perturbadoras, pero jamás son explícitas. No reíte los clichés de todas las películas de terror de los últimos tiempos, por lo que el miedo que sentirás será de una clase diferente.

Hablemos del lado técnico. La edición y la musicalización es algo revolucionario para una película del género. Las tomas aceleradas y a ritmo de rock aumentan la sensación de desesperación. Resulta increíble cómo se puede contar una historia con tan pocos recursos. Todos los escenarios fueron montados dentro de una bodega abandonada (y se nota), se grabó en poco más de dos semanas y los actores nunca ensayaron su papel, lo cual, desafortunadamente, también se nota. El aspecto técnico más impresionante a mi parecer es la iluminación. Algunas de las escenas más perturbadoras ocurren en una oscuridad casi total, y sin embargo nunca pierdes detalle de lo que el director quiere que veas.

Pero el aspecto más interesante de la cinta es, sin duda, el juego macabro del cual la víctima es el espectador. El director y guionista te hace víctima de su juego todo el tiempo. Siempre tus teorías apuntan exactamente hacia donde el director lo desea, aún cuando piensas que no es así. A veces creerás estar seguro de saber lo que está pasando y ser más listo que el director, pero déjame decirte que no lo eres.

Ahora se prepara la secuela, pero los creadores del concepto de Saw no participarán en ella mas que como productores. El director y guionista será un novato. ¿Tengo alguna esperanza de una buena secuela? No. El encanto de la primera radica en la sorpresa, que en la secuela se perdería. Sería como psicosis 2 o viernes 13 parte 2, donde ya sabes desde el principio quién es el asesino.

Como ves, no hablé tanto sobre la trama, pues no quiero arruinar la sorpresa. Hay que verla, no queda de otra. Que el juego comience.